Colombia pide a la ONU excluir la hoja de coca de la lista de sustancias dañinas

Colombia pide a la ONU excluir la hoja de coca de la lista de sustancias dañinas

En un discurso ante la Comisión de Estupefacientes de las Naciones Unidas (ONU) en Viena, la canciller de Colombia, Laura Sarabia, instó a la comunidad internacional a revisar y reformar la política global de drogas, enfocándose en excluir la hoja de coca de la lista de sustancias más dañinas. En su intervención, destacó el compromiso del Gobierno colombiano con una estrategia de erradicación rigurosa de la coca y la interdicción del tráfico de drogas, pero cuestionó la efectividad del modelo actual para combatir el narcotráfico.

Críticas al modelo de lucha contra el narcotráfico

Sarabia resaltó que, a pesar de los esfuerzos, el modelo actual de lucha contra las drogas no ha producido los resultados esperados. Según la canciller, el narcotráfico sigue siendo un obstáculo para el desarrollo del país, afectando gravemente a los campesinos, financiando grupos terroristas y destruyendo ecosistemas importantes como la Amazonía. “El narcotráfico ha frenado el desarrollo de nuestro país y ha victimizado a millones de campesinos”, afirmó Sarabia.

Exclusión de la hoja de coca de la lista de sustancias dañinas

Una de las propuestas clave de Sarabia fue la de excluir la hoja de coca de la lista de sustancias dañinas, basándose en evidencia científica que demuestra que la hoja de coca en sí misma no representa un riesgo para la salud. Además, argumentó que si se aprovechara el potencial industrial de la hoja, como en la producción de fertilizantes y bebidas, se podría reducir su relación con el narcotráfico. En este sentido, invitó a la Organización Mundial de la Salud (OMS) a evaluar los posibles usos industriales de la hoja de coca.

Aunque la propuesta ha generado debates, Sarabia aclaró que no se trata de una legalización de la cocaína. “No estamos buscando la legalización de la cocaína, sino una reforma en la política global de drogas”, aseguró, reafirmando que la erradicación y la lucha contra el narcotráfico siguen siendo una prioridad para Colombia.

Compromiso con la erradicación y resultados en el combate al narcotráfico

Colombia ha mostrado su compromiso con la lucha contra las drogas a través de varias medidas, incluyendo la erradicación de cultivos de coca y la incautación de grandes cargamentos de cocaína. Desde agosto de 2022 hasta enero de 2025, las autoridades colombianas han incautado más de 1.9 millones de kilogramos de cocaína y destruido cientos de laboratorios clandestinos. Además, el país ha sido uno de los principales contribuyentes financieros a la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDD), aportando 416 millones de dólares en la última década.

Alternativas productivas y transformación territorial

La canciller también destacó la necesidad de promover alternativas productivas rentables para las regiones más afectadas por el narcotráfico, como el cultivo de cacao y café en zonas como El Catatumbo y el Cañón del Micay. Subrayó la importancia de llevar proyectos de desarrollo y recursos a las comunidades para evitar que queden atrapadas en la violencia y el abandono.

Revisión de la política global de drogas

Sarabia cerró su intervención haciendo un llamado a la comunidad internacional para que se construya un nuevo modelo de lucha contra las drogas, basado en la evidencia científica y el respeto por la vida humana. La propuesta de Colombia se presentará para su discusión en la próxima asamblea de la Comisión de Estupefacientes de la ONU, en marzo de 2026, aunque no es una idea inédita, ya que países como Bolivia y Perú también han propuesto iniciativas similares en el pasado.

El presidente de Colombia, Gustavo Petro, también ha defendido la idea de cambiar el enfoque sobre la hoja de coca, sugiriendo su uso en productos legales como fertilizantes y alimentos, lo que mejoraría las políticas de sustitución de cultivos ilícitos. «Si la hoja de coca se utiliza en abonos, alimentos y otros usos, mejora la política de sustitución de lo ilícito», dijo Petro en su cuenta de Twitter.

La propuesta colombiana no solo refleja el compromiso de Colombia con la erradicación de cultivos ilegales y el narcotráfico, sino también la necesidad de repensar las políticas globales de drogas y abrir nuevas vías de desarrollo económico para las comunidades afectadas. Sin embargo, su implementación dependerá de un debate internacional más amplio y del respaldo de la comunidad científica y política global.