Ricardo Arriazu detalla cuatro posibles escenarios para el dólar tras el acuerdo con el FMI

En una conferencia organizada por SyC Inversiones, el economista Ricardo Arriazu, uno de los asesores más escuchados por el presidente Javier Milei, presentó sus análisis sobre las posibles alternativas para la política cambiaria de Argentina tras el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI). En su exposición, titulada “Incertidumbres en las economías mundial y Argentina”, Arriazu destacó cuatro caminos posibles para la evolución del tipo de cambio, con especial foco en el régimen de devaluación que aplica el país.

Cuatro Escenarios para la Política Cambiaria

Arriazu estructuró las alternativas considerando la continuidad o modificación del crawling peg actual (un ajuste mensual del tipo de cambio del 1%), y las posibles implicancias para la economía argentina. Los escenarios que planteó fueron:

  1. Mantener el 1% mensual: Este escenario, en el que el tipo de cambio continúa con una devaluación gradual mensual del 1%, es el modelo actual, y el economista no lo descartó de forma definitiva.

  2. Reducir la devaluación al 0,5% mensual: Arriazu expresó su preferencia por esta alternativa, que implicaría reducir la velocidad de devaluación a la mitad a partir de la mitad del año. Esta opción busca moderar la inflación y generar estabilidad en el tipo de cambio.

  3. Devaluación brusca: Este escenario fue rechazado por Arriazu de manera tajante, afirmando que tiene una «probabilidad cero». Según el economista, una devaluación abrupta traería consecuencias muy negativas para la economía argentina.

  4. Flotación con banda: Finalmente, Arriazu calificó esta opción, que buscaría satisfacer las exigencias del FMI, como una «estupidez». En su opinión, un régimen de flotación controlada en Argentina sería inviable mientras el dólar continúe siendo la unidad de cuenta. Además, el economista explicó que los rumores sobre la posibilidad de flexibilizar el tipo de cambio causaron una reacción negativa en los mercados, especialmente en los fondos de carry trade.

La Importancia de la Estabilidad Cambiaria

Arriazu destacó que la estabilidad del tipo de cambio es fundamental para mantener la desaceleración inflacionaria y sostener la demanda interna. En este sentido, consideró que un cambio drástico en el régimen cambiario podría tener efectos negativos, particularmente en un contexto de inflación elevada y alta incertidumbre económica. Además, subrayó que mientras el dólar sea la unidad de cuenta en Argentina, cualquier fluctuación significativa del tipo de cambio podría generar problemas, ya que alteraría los precios relativos y podría desestabilizar aún más la economía.

Los Efectos de las Tarifas y los Precios Relativos

En relación con los efectos del tipo de cambio sobre los precios relativos, Arriazu mencionó que el aumento de tarifas de servicios públicos en dólares podría generar una apreciación del tipo de cambio, a menos que los salarios se desplomen, lo cual consideró políticamente inviable. Este fenómeno, señaló, actúa como una “restricción estructural” para el esquema cambiario, ya que los aumentos de tarifas en dólares tienden a aumentar la presión sobre el tipo de cambio.

Proyecciones de Inflación y Economía

Arriazu también repasó su proyección de inflación para el 2025, actualizando sus expectativas en torno a 18%, bajo el supuesto de que se mantenga el régimen de devaluación actual, las tarifas suban un 10% en dólares y los precios internacionales se mantengan estables. Sin embargo, advirtió que cualquier cambio en estas variables podría alterar significativamente sus estimaciones.

Respecto a la economía global, el economista alertó sobre el impacto de las políticas comerciales del expresidente estadounidense Donald Trump, especialmente los nuevos aranceles que podrían generar presiones inflacionarias en los EE. UU. y afectar las relaciones comerciales globales. En particular, señaló que Argentina podría beneficiarse de la guerra comercial en el mercado de soja y sus subproductos, dada su capacidad industrial y el bajo nivel de exportaciones de poroto a China.

Crecimiento y Sectores en Recuperación

En cuanto al crecimiento económico de Argentina, Arriazu destacó que la recuperación de la actividad económica comenzó en el segundo trimestre de 2024, impulsada por un rebote en el sector agropecuario tras la sequía de años anteriores. Según sus estimaciones, el PBI de 2025 podría crecer alrededor del 5,9%, aunque aclaró que prefería ser conservador en sus previsiones, dada la incertidumbre en torno a la demanda agregada y otros factores internos y externos.

En términos de sectores específicos, señaló que, si bien la industria y la construcción mostraron caídas importantes, sectores como comercio y transporte experimentaron un repunte en los últimos meses. La cosecha agropecuaria fue uno de los factores clave detrás de la recuperación económica, con un incremento del 31% en la producción, lo que representó un impacto positivo de 3 puntos del PBI.

Reflexiones Finales

Para Arriazu, la clave de la política económica en Argentina radica en mantener un tipo de cambio predecible y en evitar ajustes drásticos que puedan desestabilizar aún más la economía. La estabilidad macroeconómica, señaló, dependerá de factores internos como la política fiscal y monetaria, así como de factores externos como la evolución de los precios internacionales y las relaciones comerciales con países clave como Brasil.

En resumen, el economista es cauteloso en cuanto a las opciones de política cambiaria, destacando que, si bien existen diversas alternativas, la moderación y la estabilidad son esenciales para consolidar la recuperación económica de Argentina.