Nuevo apagón afecta a más de 620.000 usuarios en AMBA

Nuevo apagón afecta a más de 620.000 usuarios en AMBA

Segundo corte eléctrico del día en AMBA

Un segundo apagón dejó sin electricidad a más de 620.000 usuarios en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) alrededor de las 12:40 del mediodía, afectando especialmente a los clientes de la distribuidora Edesur. Esta interrupción se produce tras un corte masivo ocurrido por la madrugada, que alcanzó a 550.000 usuarios. Además, se desconectó el servicio en el Noreste Argentino (NEA), lo que generó más complicaciones en la red eléctrica.

Causas del apagón y su impacto

El corte de energía de esta tarde fue causado por una falla en dos líneas de alta tensión, lo que afectó directamente la distribución de energía en el AMBA. A su vez, las altas temperaturas y la salida de varias máquinas de generación contribuyeron a la interrupción. Fuentes del sector apuntaron a una falta de mantenimiento como una posible causa, aunque hasta el momento no se ha emitido una declaración oficial sobre el origen del desperfecto.

Este nuevo apagón se presenta como una repetición de los problemas que ya se habían vivido en la madrugada, lo que agrava la situación para los habitantes de la región. A pesar de los esfuerzos por restablecer el suministro, un tercio de los usuarios afectados por el corte de la tarde aún siguen sin luz, aumentando la preocupación sobre la estabilidad del sistema eléctrico en la región.

El impacto en la calidad de vida y la necesidad de soluciones

Este segundo corte de energía refleja la vulnerabilidad de la infraestructura eléctrica en el AMBA, especialmente en un contexto de temperaturas altas que aumentan la demanda de electricidad. La repetición de apagones en tan corto tiempo resalta la necesidad urgente de revisar y reforzar el mantenimiento de las redes eléctricas en la región para evitar futuras interrupciones y garantizar el bienestar de los usuarios.

A medida que el número de afectados sigue creciendo, las autoridades y las empresas encargadas de la distribución de energía enfrentan presiones para ofrecer soluciones rápidas y eficaces que restituyan el servicio de forma definitiva. La falta de una respuesta clara y rápida ante estos problemas solo aumenta la frustración de los usuarios y pone de manifiesto las debilidades del sistema energético local.