Corea del Sur y Estados Unidos dispararon el martes cuatro misiles al Mar del Este, dijo una fuente militar en Yonhap, al día siguiente de que el régimen de Kim Jong-un disparara una misil que sembró el pánico en Japón.
El lanzamiento forma parte de los ejercicios que realizan de forma conjunta ambos países, actividad que Corea del Norte denuncia como una provocación. Según información del Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur, ambos países dispararon individualmente dos misiles del sistema de misiles tácticos del ejército contra objetivos simulados.
La medida se produce después de que Pyongyang lanzara un misil balístico no identificado hacia Japón. El tiroteo hizo que las autoridades de islas remotas que forman parte de Tokio, así como de las prefecturas de Hokkaido y Aomori, pidieran a la gente que buscara refugio de inmediato.
Pyongyang realiza pruebas con misiles balísticos de corto alcance desde el 24 de septiembre, en una nueva escalada de tensiones en la península que coincidió con ejercicios militares conjuntos en Washington y Seúl y con la visita de Kamala Harris, vicepresidenta de Estados Unidos. El primer ministro japonés, Fumio Kishida, dijo más tarde que el lanzamiento fue “un acto de barbarie”.
Tokio calificó este saqueo y la serie de pruebas balísticas como “acciones que podrían tener un grave impacto en la vida y la propiedad del pueblo japonés”.
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