El Consejo Nacional Electoral (CNE) de Honduras declaró a Nasry Asfura como ganador de las elecciones presidenciales, luego de concluir un proceso de conteo que se extendió por varias semanas. El organismo electoral dio a conocer los resultados oficiales tras finalizar la revisión de 2 mil 792 actas que presentaron inconsistencias técnicas y numéricas durante el escrutinio inicial.
De acuerdo con el CNE, Asfura obtuvo 40.3% de los votos, mientras que su contendiente más cercano, Salvador Nasralla, alcanzó 39.5%. La diferencia mínima entre ambos candidatos marcó una de las contiendas más cerradas de los últimos años en el país centroamericano. Tras el anuncio, simpatizantes del candidato ganador se congregaron en distintos puntos de Tegucigalpa para celebrar el resultado.
¿Por qué se retrasaron los resultados finales?
El proceso electoral enfrentó retrasos, fallas técnicas y acusaciones de fraude, lo que obligó al CNE a realizar un escrutinio especial. Durante esta etapa, las autoridades revisaron actas que el sistema no logró procesar correctamente. En consecuencia, alrededor de 15% de los votos requirió conteo manual, debido a errores detectados en la transmisión de datos.
Las autoridades electorales señalaron que el procedimiento buscó garantizar certeza y transparencia en un escenario de alta competencia. Aunque el proceso generó tensión política y social, el CNE sostuvo que la revisión permitió confirmar la validez de los resultados finales. Finalmente, el organismo afirmó que el cómputo cumplió con los lineamientos legales vigentes.
¿Qué implica este resultado para el país?
El triunfo de Nasry Asfura representa un cambio en el rumbo político de Honduras. El resultado marcó un revés para el partido gobernante de izquierda, cuya candidata Rixi Moncada obtuvo 19.19% de los sufragios. Con este desenlace, el país abre una nueva etapa bajo un liderazgo de orientación conservadora, tras varios años de administración encabezada por fuerzas progresistas.
Analistas políticos señalaron que el resultado refleja una sociedad dividida, con preferencias electorales muy equilibradas entre los principales aspirantes. Además, el estrecho margen de votación subrayó la importancia de fortalecer los sistemas electorales y los mecanismos de conteo para futuros procesos.
En el plano internacional, la victoria de Asfura generó reacciones diversas. Observadores destacaron la necesidad de mantener la estabilidad institucional y promover el diálogo entre los distintos sectores políticos. Mientras tanto, el candidato electo llamó a la unidad nacional y a respetar la decisión expresada en las urnas.
Con la declaración oficial del CNE, Honduras inicia el periodo de transición rumbo al nuevo gobierno. En los próximos días, las autoridades electorales continuarán con los procedimientos administrativos correspondientes, mientras los actores políticos definen sus posturas frente a un resultado que cerró una de las elecciones más competidas en la historia reciente del país.

