Arresto ordenado por el Supremo Tribunal Federal
La detención de Jair Bolsonaro generó tensión política en Brasil durante el fin de semana. La Policía Federal llegó este sábado al domicilio del exmandatario en Brasilia y ejecutó una orden de arresto preventivo. El Supremo Tribunal Federal avaló la medida después de recibir información sobre una posible movilización masiva de simpatizantes que, según el tribunal, podía facilitar un escape. La detención de Jair Bolsonaro ocurrió pocos días antes del inicio formal de su condena por intento de golpe de Estado.
Los agentes ingresaron al complejo residencial durante la mañana. El operativo avanzó sin incidentes y retiró al expresidente en un convoy supervisado por la Policía Federal. Autoridades señalaron que la convocatoria a una vigilia, organizada por Flávio Bolsonaro, hijo mayor del exmandatario, representó un riesgo real de evasión. Esa concentración, prevista para desarrollarse por varios días, podía crear confusión y permitir que el expresidente rompiera la vigilancia impuesta por el tribunal.
Reacciones de la familia y postura del tribunal
Flávio Bolsonaro reaccionó de inmediato desde redes sociales. Calificó la vigilia como un acto de oración por la salud de su padre y por el futuro de la democracia brasileña. En un video dirigido a sus simpatizantes, pidió apoyo activo y cuestionó la decisión judicial. Sus declaraciones contrastaron con la versión del Supremo Tribunal Federal, que aseguró que la convocatoria demostraba una alta probabilidad de fuga.
El tribunal también señaló una falla reciente en la tobillera electrónica del exmandatario. Esa alerta reforzó la sospecha de que Bolsonaro planeaba romper el dispositivo y desaparecer en medio de la multitud reunida frente a su residencia. Magistrados advirtieron que esa posible confusión podía generar consecuencias impredecibles para la seguridad pública.
La defensa de Bolsonaro y su situación legal
Los abogados del exmandatario rechazaron las acusaciones. Indicaron en un comunicado que Bolsonaro permanecía en su domicilio bajo supervisión constante y que nunca intentó escapar. También expresaron preocupación por su estado de salud y sostuvieron que el arresto podía representar un riesgo físico para él. La defensa insistió en que la vigilia estaba protegida por la ley y que no tenía relación con un plan de evasión.
Bolsonaro enfrenta una condena de 27 años por conspirar para alterar el resultado electoral de 2022 y por liderar acciones para mantenerse en el poder. Cuatro de los cinco jueces del Supremo Tribunal Federal votaron a favor de declararlo culpable de diversos delitos, incluidos la formación de una organización criminal armada y los ataques del 8 de enero de 2023 contra edificios gubernamentales.
El caso marca un momento histórico para Brasil y profundiza la división política en el país. Mientras simpatizantes denuncian una persecución, las autoridades sostienen que el proceso demuestra la fortaleza de las instituciones democráticas.